Arte

«El arte cruza todas las facetas de lo que soy»

Yudinela Ortega es crítica de arte y gestora cultural. Nacida en Cuba, donde adquirió una sólida formación y experiencia profesional en centros y galerías de arte, se trasladó a España en 2018. Aquí tuvo que comenzar de cero para crear sus lazos profesionales y personales con el país.

Este año se estrena como directora artística de la Feria Art Madrid por primera vez, definiendo la visión artística y estratégica de la feria.

Conversamos con esta profesional inteligente que posee una visión completa y profunda del mundo y mercado del arte.

– Eres licenciada en Historia del Arte ¿qué te impulsó a estudiar esta carrera y en qué momento decidiste que el mundo del arte sería tu sector?

Cuando era niña soñaba con dar un discurso en la ONU, es posible que mi discurso soñado fuera sobre la importancia que tiene el arte en la vida y en la psicología de cualquier persona. Yo nací en un pueblo pequeño, guajira me dirían en Cuba. Y eso supuso que la fatalidad geográfica se convirtiera en un motor para siempre querer estar informada. Ver todo el cine posible, leer todos los libros posibles y escuchar toda la música posible y tomar nota. Mi verdadera inquietud y mi decisión de estudiar Historia del Arte en la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana es también fruto de esos insaciables deseos de estar rodeada de creatividad; de formarme en las humanidades y al fin y al cabo de ser la mediadora que soy hoy. Porque entre todas las vertientes o posibilidades que tiene mi profesión como historiadora del arte, la mediación cultural es mi preferida. Cuando realizas un comisariado, te conviertes en la persona que media entre la obra y el público; cuando escribes un texto crítico, eres el resorte que comunica el significado de una obra y el público que te lee. El mundo del arte no es solo mi sector profesional, es mi vida; cruza todas las facetas de lo que soy.

«Entre todas las vertientes o posibilidades que tiene mi profesión como historiadora del arte, la mediación cultural es mi preferida»

«El mundo del arte no es sólo mi sector profesional, es mi vida; cruza todas las facetas de lo que soy»

– Has trabajado en centros de arte y galerías en Cuba y en España ¿cómo cambió tu visión de la gestión cultural y del mercado del arte con estas experiencias?

Son dos mundos totalmente diferentes. E intento no viciar mi experiencia desde la comparación. En Cuba tuve la suerte de poder escoger dónde quería iniciar mi trayectoria profesional. En España me ha tocado comenzar de cero. Como todo emigrante. Y estoy agradecida de poder hacer coincidir en mi praxis la gestión cultural, el comisariado de exposiciones, la crítica de arte y el mercado del arte. En Cuba estamos bien formados académicamente pero no nos enseñan que para “triunfar” en este ámbito que es el mundo del arte muchas veces no basta con tener una formación rigurosa. Sin embargo, experimentar el trabajo en una galería o un centro cultural en Cuba te prepara para enfrentar todo lo que venga luego. Ha sido mi caso.

Estar expuesta a dinámicas tan diferentes me ha permitido ampliar mis horizontes en el terreno de la cultura y del arte contemporáneo específicamente. Valoro la riqueza que hay en el aprendizaje de métodos de trabajo diversos; me interesa ahondar en las particulares de cada contexto. Y expongo mi sensibilidad a lo nuevo, a todo lo que me aporte. Trabajar en diferentes países me ha demostrado que existen diferencias significativas en la forma en que funciona el mercado del arte, incluyendo la demanda de ciertos tipos de arte, los precios, las tendencias y las estrategias de comercialización. He aprendido a no ser categórica en ciertos aspectos. El contexto es importante. Una obra de un artista cubano en España, por ejemplo, funciona con otros códigos, tiene la exigencia de escaparse de lo local para ser entendida por un público no cubano o caribeño…

Y lo que más aprecio de tener esta experiencia son todos los profesionales que he tenido la oportunidad de conocer. Ver crecer mi red de contactos y colaborar, la clave en un perfil profesional como el mío, es la colaboración.

«experimentar el trabajo en una galería o un centro cultural en Cuba te prepara para enfrentar todo lo que venga luego»

«He aprendido a no ser categórica en ciertos aspectos. El contexto es importante»

– Como comisaria has organizado diferentes exposiciones ¿cómo planteas estos proyectos y qué temáticas te interesan?

Si miro un poco en retrospectiva hay un elemento común en mi práctica curatorial y es la de intentar entender o ser parte del trabajo de artistas de mi generación. He trabajado mucho con artistas de entre los noventa y los dos mil. Quizás soy un poco cándida o romántica en este aspecto pero en mis curadurías el primer impulso ha sido el de la verdad de la obra. Me preocupa la disgregación de mi generación, emigrada casi toda – como tantas generaciones de cubanos antes de mí- pero en concreto me mueve cómo ve el mundo un artista cubano desde un lugar de enunciación que no es el suyo. El elemento sensorial, la autorreferencialidad y la individualización del sujeto contemporáneo visto desde el arte son otros aspectos que me preocupan y trato de integrar también en mis proyectos.

La investigación es imprescindible para iniciar la aventura de como dicen aquí: comisariar. Planteo muchas veces primero la idea, la problemática y a partir de ahí encauzo la narrativa expositiva. Tengo especial interés en los procesos. Siempre digo que curar un proyecto es como dar a luz – literalmente-. Luego de criar, esa hija crece y se va al mundo. Sucede lo mismo con una exposición. Crear para los demás. Para mí es importante no solo el lugar desde donde hablo, también es imprescindible que quienes me lean – en cualquier lugar- puedan entender de qué va todo esto. Porque parafraseando a una profesora que tuve: Curar no es coser y cantar… Es algo más.

«Hay un elemento común en mi práctica curatorial y es la de intentar entender o ser parte del trabajo de artistas de mi generación»

«me mueve cómo ve el mundo un artista cubano desde un lugar de enunciación que no es el suyo»

– En 2018 te trasladaste a Madrid ¿qué supuso este cambio para ti personal y profesionalmente?

Para un texto que publiqué con motivo de la presentación del libro de un artista cubano, escribí algo así como que en Cuba: todos queremos volar. Porque es verdad. Aunque no sea un pensamiento con el que convivimos a diario. Siempre la idea de irnos de Cuba está presente. Yo no lo tenía planificado hasta que sucedió. Y ha sido el cambio más importante que he tenido en mi vida hasta ahora. Te diría que emigrar es como volver a nacer.

Al principio te sientes indefenso, no sabes cómo va a continuar tu vida. Pero poco a poco todo se va asentando. Y los lugares y las personas que al inicio eran extrañas comienzan a resultar familiares. Y el tiempo se encarga de irte conectando con nuevos círculos de personas. Emigrar ha sido duro, ha sido un proceso lento y me ha convertido en una persona diferente. Más madura, quizás. Emigrar es tener siempre una mochila a cuestas, algunas veces va repleta de emociones y otras veces ese peso se va distribuyendo aunque la mochila siempre la llevas contigo. Yo estoy agradecida de esta experiencia vital.

Hoy, a cinco años de haber iniciado mi proceso migratorio, comienzo a reconocerme nuevamente, a reconectar conmigo y a sentirme plena personal y profesionalmente.

«Emigrar es como volver a nacer»

«Emigrar ha sido duro, ha sido un proceso lento y me ha convertido en una persona diferente. Más madura, quizás»

– Escribes para diferentes publicaciones como ART ONCUBA, C de Cuba Art Magazine, Artishock e Hypermedia Magazine ¿desde qué ángulo realizas la crítica de arte?

La crítica es un ejercicio que intento mantener vivo en mi práctica profesional. Tengo una preocupación y creo que una responsabilidad es que me entiendan. Siempre digo que escribo para que quien lea, comprenda. Lo que más disfruto es el proceso de escritura. La búsqueda de referencias, antecedentes; mi despreocupación ante la cita literal y mi pasión por el parafraseo. «The Oration Queen», dice alguien por ahí que soy. Quien quita que algún día pueda colaborar con El Cultural o que me publiquen en el New York Magazine. Yo manifiesto…(risas) Fuera bromas, me siento afortunada de poder escribir para estos medios que tan profesionalmente hacen su labor. Existen pocos espacios para la crítica de arte en la actualidad. Creo que es importante el papel social de la crítica de arte y que sigan existiendo espacios para ejercerla con libertad.

Considero que mi escritura tiene un enfoque multidimensional. Aunque prefiero el ensayo, la poscrítica o los textos que acompañan un catálogo creo que «la confrontación es siempre necesaria para reivindicar y revisar los relatos que hemos heredado», parafraseando un poco a Hal Foster. Preservo con atención la perspectiva y el lugar desde el que suscribo mis textos, intentando combinar la apreciación estética y la comprensión contextual. Además, me esfuerzo por mantener una mirada crítica pero abierta, reconociendo la diversidad de perspectivas y enfoques dentro del mundo del arte. En mis críticas, el medio y el receptor son importantes. Busco ejercer la motivación del público especializado que pueda leerme como el neófito, en temas de arte contemporáneo. Poner en crisis para luego destacar la calidad estética y técnica de las obras, así como su capacidad para provocar emociones, generar diálogo y promover el entendimiento y la apreciación del arte en todas sus formas y manifestaciones.

«Me esfuerzo por mantener una mirada crítica pero abierta, reconociendo la diversidad de perspectivas y enfoques dentro del mundo del arte»

«Busco ejercer la motivación del público especializado que pueda leerme como el neófito, en temas de arte contemporáneo»

– Has sido docente de Art Consulting y Crítica de Arte en Arte al Cuadrado ¿de qué manera tu experiencia profesional ha servido a tus alumnos?

Ha sido toda una experiencia. Un aprendizaje que me ha dejado un retorno increíble. Imagina poder impartir un curso a personas de diferentes lugares de España y Latinoamérica. Me ha dejado un rédito de profesionales en lugares donde ocurren toda suerte de eventos y proyectos vinculados con la cultura, que me han impactado de cerca. Me gusta enseñar pero la retroalimentación que se recibe cuando estás frente a un aula – virtual en este caso- ha sido lo más reconfortante. Creo que he intentado siempre impartir una clase tan teórica como por ejemplo, la introducción a la crítica de arte desde la experiencia. Y eso los alumnos lo agradecen siempre. Un programa que tiene una duración muy corta pero que genera todo tipo de debates. O cómo entender que una obra que sale a subasta y se vende por precios astronómicos no tiene que ser necesariamente la mejor obra de arte… Para cada edición de estos cursos, investigo muchísimo. Trato de compartir conocimientos y de relatar cuestiones actualizadas; preparamos dinámicas en torno a las teorías del arte, las historias del arte, prácticas curatoriales y tendencias contemporáneas. Las habilidades prácticas es otra de las categorías que intento engarzar siempre en estos cursos. Que entiendan que la teoría una vez dominada hay que ponerla en marcha.

Los aliento escribir, a involucrarse en proyectos experimentales, a desarrollar proyectos de gestión cultural y lo más importante a trabajar y fortalecer el pensamiento crítico.

Tener criterios propios y perspectiva en relación al arte y su papel en la sociedad.

«Me gusta enseñar pero la retroalimentación que se recibe cuando estás frente a un aula – virtual en este caso- ha sido lo más reconfortante»

– En este momento eres directora artística de la Feria Art Madrid y previamente trabajaste en ella como coordinadora ¿cómo ha cambiado tu trabajo y qué supone organizar una de las ferias más importantes de la Semana del Arte en Madrid?

Como directora artística de la Feria Art Madrid, mi papel ha experimentado una transformación significativa en comparación con el rol que tenía antes como coordinadora. Mis responsabilidades se han ampliado, pasando de la coordinación de aspectos logísticos a la definición de la visión artística y estratégica de la feria. Organizar una de las ferias más importantes de la Semana del Arte en Madrid es un desafío apasionante. Supone una gran responsabilidad en la promoción y difusión del arte contemporáneo, así como en la creación de un espacio dinámico y atractivo que fomente el diálogo entre artistas, galeristas, coleccionistas y el público en general.

Como directora artística, uno de los procesos que más disfruto es el período de aplicación; cuando recibimos las propuestas expositivas de las galerías e iniciamos la conceptualización y diseño de la siguiente edición de Art Madrid. Estoy rodeada, además, de un equipo de trabajo estupendo. Trabajamos en piña para asegurarnos de que la feria refleje las tendencias actuales del arte contemporáneo, presente una variedad de propuestas artísticas innovadoras y proporcione un espacio inclusivo que celebre la diversidad creativa. Además, como parte de mi rol, también estoy comprometida en establecer alianzas estratégicas con instituciones culturales, medios de comunicación y otros actores clave en el ámbito del arte, con el fin de ampliar el alcance y la relevancia de la feria tanto a nivel nacional como internacional. Es una experiencia que me ha permitido trabajar en libertad, combinar mis capacidades de gestión y liderazgo con esa parte creativa que habita en mí. Y sobre todo ha sido un voto de confianza que aprovecharé al máximo para lograr que Art Madrid continúe siendo una de las citas de referencia en la Semana del Arte.

«uno de los procesos que más disfruto es el período de aplicación; cuando recibimos las propuestas expositivas de las galerías e iniciamos la conceptualización y diseño de la siguiente edición de Art Madrid»

– ¿Qué novedades presenta este año Art Madrid y cómo ha sido el proceso de selección de galerías?

En esta edición de Art Madrid Programa Paralelo se compone de un diverso grupo de actividades de artistas que inician su trayectoria profesional. Apostamos por proyectos experimentales y temáticas de actualidad que tendrán lugar en la antesala de la feria y durante los días en los que se celebra. El programa tiene como objetivo clave brindar apoyo institucional a nuevas generaciones de artistas, proporcionándoles la oportunidad de exponer sus proyectos en el circuito del mercado del arte contemporáneo. Y las actividades que lo integran son: Arte y Palabra: Conversaciones con Carlos del Amor; OPEN BOOTH con la artista invitada: Marina Tellme; Intercesiones X Tara for Women; Lecturas. Recorridos comisariados; La Quedada. Circuito de estudios Art Madrid’24 y el Programa de Coleccionismo: One Shot Collectors.

El proceso de selección de galerías se realiza a partir de unos criterios establecidos por la organización de la feria. En los que tienen gran peso la calidad de las propuestas expositivas, el recorrido de la galería y los artistas que representa. El equipo de la feria de la mano de su comité asesor se encarga de analizar y seleccionar las galerías participantes en cada edición de Art Madrid.

«Apostamos por proyectos experimentales y temáticas de actualidad que tendrán lugar en la antesala de la feria y durante los días en los que se celebra»

«El programa tiene como objetivo clave brindar apoyo institucional a nuevas generaciones de artistas, proporcionándoles la oportunidad de exponer sus proyectos en el circuito del mercado del arte contemporáneo»

– ¿Cómo consideras que debe cambiar estructuralmente el mundo del arte contemporáneo para que sea más igualitario para las mujeres profesionales?

Como profesional del mundo del arte contemporáneo, considero fundamental implementar cambios estructurales para promover la igualdad de oportunidades y el reconocimiento equitativo de las mujeres en la industria. Algunas medidas que podrían contribuir a este objetivo incluyen la promoción de la diversidad, garantizando la representación equitativa de mujeres en roles de liderazgo y visibilidad, así como el acceso igualitario a oportunidades de exposición, financiamiento y recursos para su desarrollo profesional. Es esencial abordar los sesgos de género que persisten en la selección de artistas y en la asignación de roles en instituciones culturales. Asimismo, creo imprescindible destacar y promover activamente el trabajo de mujeres artistas a través de diversas plataformas, contrarrestando la subrepresentación histórica. La implementación de programas educativos y de sensibilización es crucial para promover una reflexión crítica y un cambio cultural hacia una mayor equidad y justicia en el mundo del arte contemporáneo.

«Creo imprescindible destacar y promover activamente el trabajo de mujeres artistas a través de diversas plataformas, contrarrestando la subrepresentación histórica»

– De toda tu trayectoria hasta el momento, ¿de qué proyectos te sientes más orgullosa y qué personas han sido fundamentales en tu carrera?

No me decanto por ninguno en específico. Todos, en mi caso, son la evidencia de que podemos llegar a donde nos propongamos. Aunque las exposiciones colectivas que he comisariado son de las experiencias más enriquecedoras que he tenido. En cuanto a las personas fundamentales en mi carrera, destacaría a mentores y colegas que me han brindado apoyo, orientación y oportunidades de crecimiento. También valoro enormemente el respaldo de amigos y familiares, cuyo apoyo emocional ha sido fundamental en los momentos de desafío y celebración. Me siento privilegiada de poder trabajar con artistas talentosos, curadores inspiradores y profesionales del arte comprometidos, cuya creatividad y pasión han enriquecido mi trayectoria y han contribuido al éxito de los proyectos en los que he participado.

«Todos los proyectos, en mi caso, son la evidencia de que podemos llegar a donde nos propongamos»

– ¿Cómo es tu tiempo cuando no trabajas?

Cuando no estoy trabajando, me gusta dedicar tiempo a actividades que me relajan y me permiten recargar energías. Me encanta hacer crochet. Tejer como decimos en Cuba. Soy una especialista en hilos, agujas y tutoriales de YouTube para hacer piezas decorativas. Luego el collage. He empezado un libro collage relacionado con algunos textos que escribo sobre artistas o temas que me interesan. Crochet y collage son un poco mis mantras. También disfruto mucho leyendo. Para mí ir en metro es tiempo de lectura definitivamente… Soy muy hogareña así que intento combinar todo lo que puedo hacer sola y tranquila con actividades que tengo en común con mi pareja. Los sábados que no son de invierno son sábados de ir a patinar al Retiro, por ejemplo.

– Un deseo que te gustaría se hiciera realidad

Si pudiera pedir un deseo y que se hiciera realidad, pediría libertad. Libertad en todos los sentidos: Libertad para mi país, libertad para crear, libertad para ser y pertenecer a donde cada uno desee. Libertad de expresión y libertad de espíritu.

«Si pudiera pedir un deseo y que se hiciera realidad, pediría libertad»

«Libertad de expresión y libertad de espíritu»

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