Arte

Entrevista y fotografías por Berta Delgado

«Me interesa exponer la parte que ha sido oculta en el arte»

Sara Torres Sifón es Historiadora del Arte, Crítica, Comisaria y Directora de la Revista PAC (Plataforma de Arte Contemporáneo).

Sus proyectos de comisariado y artículos de crítica siempre se caracterizan por dar protagonismo al arte y los artistas que permanecen ocultos por el discurso hegemónico que ha primado culturalmente hasta ahora, especialmente al trabajo realizado por mujeres artistas.

Su trayectoria profesional ha estado muy unida a la revista PAC desde los comienzos de la publicación en diferentes ámbitos y tareas, tomando ahora el relevo en su dirección. En esta entrevista profundizamos en su carrera, sus proyectos de comisariado y el enfoque de la revista para los próximos años.

– ¿Cómo comenzó tu interés en el arte y cuándo decidiste que querías que fuera tu medio profesional?

Me gustaría contestar que fue algo que siempre tuve claro, pero no es así. Es cierto que desde pequeña tenía un interés especial por la cultura, en especial por la historia, y que mi rumbo se decantaba hacía allí… pero no me planteaba ser una profesional del arte, quizá porque no supieron trasmitirme todas las posibilidades que encierra.
Esto cambió al toparme con un profesor en el instituto que fue especialmente inspirador, no tenía problemas en acompañarnos a los museos fuera del horario de clases, nos proponía lecturas, nos presentó artistas… Creo que fue durante ese tiempo, con 15 o 16 años, cuando supe que quería pasar mi vida junto a los artistas y sus obras.

«Esto cambió al toparme con un profesor en el instituto que fue especialmente inspirador»

«fue durante ese tiempo, con 15 o 16 años, cuando supe que quería pasar mi vida junto a los artistas y sus obras»

– Eres Historiadora del Arte con Máster en Museografía y montaje de exposiciones ¿de qué manera cambiaron estos estudios tu manera de ver el arte y cómo ha evolucionado esta mirada con el tiempo?

Hasta el momento en que decidí que quería ser Historiadora del Arte, mi relación con el arte se quedaba en los destellos, sentía fascinación por ciertas obras o estilos que te deslumbran en un primer impacto, pero realmente no comprendía todo lo que hay detrás. Una vez terminé la carrera llegó el momento de plantearte qué hacer, habría sido maravilloso ser investigadora de los depósitos de arte de una gran institución, pero no era mi destino. En lugar de ello decidí estudiar museografía y montaje de exposiciones, quería ser comisaria, una de las profesiones que no todo el mundo conoce o entiende, y que de la que cuando hablas fuera del sector se te quedan mirando con cara extraña… una vez llegaron a preguntarme si era policía al decir a lo que me dedicaba…

«quería ser comisaria, una de las profesiones que no todo el mundo conoce o entiende»

Según vas estudiando, vas educando tu mirada, empiezas a ser consciente de lo que te rodea y comienzas a plantearte cuestiones sobre lo que siempre te han transmitido como verdades absolutas. Realidades que podrían ser absolutas hace 80 años, pero que desde luego yo no creía que lo fueran en el momento que me las imponían y por supuesto no lo son ahora… Recuerdo que al presentar el proyecto expositivo final de Máster una de las profesoras me cuestionó muy azorada que propusiéramos una muestra en la que el espectador era protagonista y en la que la intención consistía en que fuese pasando por diferentes estados de ánimo al verla… En ese momento esto pareció una locura, no era el mensaje que querían transmitir ya que según ellos una exposición debía ser neutra, sencilla y minimalista.
Creo que nada es inamovible y no existen las verdades absolutas… no hay nada que me dé más reparos que la gente que cree que ya lo sabe todo, que es un experto y que no tiene nada más que aprender. Creo que el arte siempre tiene algo nuevo que mostrar, siempre hay un nuevo estudio o exposición que te da la vuelta a la cabeza y siempre encontraras una nueva reflexión que dé un giro a la manera en la que pensabas.

«Creo que nada es inamovible y no existen las verdades absolutas»

«el arte siempre tiene algo nuevo que mostrar, siempre hay un nuevo estudio o exposición que te da la vuelta a la cabeza y siempre encontraras una nueva reflexión que dé un giro a la manera en la que pensabas»

– Eres crítica de arte y has trabajado en diferentes revistas culturales ¿desde qué óptica realizas la crítica y qué te preocupa más comunicar?

Creo que es muy importante estar conectado con lo que ocurre en la sociedad para poder crecer como comunidad. El arte debe ser accesible para todos, es una tarea que tenemos pendiente, y con mi trabajo intento acercar el arte contemporáneo a los grupos que pueden pensar que es elitista.
Desde hace algunos años me estoy centrando en mostrar que el arte tiene que ser inclusivo, me interesa exponer la parte que ha sido oculta, la que se obviaba porque la crítica hegemónica no creía que tenía el suficiente valor.

– ¿Qué arte y qué artistas son los/as que más te interesan en este momento?

Me interesan mucho las propuestas artísticas que se están haciendo con perspectiva feminista. Hay muchas artistas que me resultan extremadamente interesantes, por ejemplo, Kara Walker, Ana Mendieta, Cecilia Vicuña, Regina José Galindo, Marina Vargas…
También sigo muy de cerca el trabajo de los artistas jóvenes que trabajan en el ámbito nacional, hay propuestas realmente interesantes.

– Actualmente eres directora de PAC – Plataforma de Arte Contemporáneo, espacio con el que llevas colaborando desde hace 11 años como crítica, redactora de contenidos y gestora cultural ¿qué ha supuesto para ti asumir la dirección y qué nuevo enfoque quieres darle? 

He tenido la suerte de estar unida a PAC desde prácticamente cuando se creó. Al principio colaboraba de manera esporádica escribiendo artículos sobre los artistas o exposiciones que me gustaban y poco a poco fui teniendo más responsabilidades. He sido redactora y crítica de la revista, pero también he sido la persona encargada de la programación, el medio de unión con los colaboradores y he trabajado como gestora y comisaria en muchos de los proyectos que hemos realizado a lo largo de los años.
PAC es mi casa, siempre he pensado que una de las mejores cosas que tiene el proyecto es su equipo, por sus ganas y saber hacer. Para mí ha sido un lujo trabajar, aprender y crecer, desde el comienzo de la plataforma, con grandes profesionales como son Óscar García García, James Marr y Victoria Arribas; pero PAC no somos cuatro personas, la comunidad que rodea el proyecto es inmensa y tengo la suerte de haber podido trabajar con muchísimos críticos, comisarios y artistas a los que agradezco profundamente su pasión e implicación.
Cuando estás inmerso en un proyecto así y te ofrecen la posibilidad de dirigirlo te da una gran alegría, pero también un poco de vértigo puesto que el listón que ha dejado Óscar García ha sido muy alto.
El objetivo es seguir ampliando la comunidad que rodea el proyecto. Aumentar el círculo de acción, hasta ahora nos hemos centrado prioritariamente en lo que pasaba en España a nivel artístico, pero eso va a ir cambiando poco a poco… ya hay artículos sobre lo que ocurre en el resto de Europa, África, América y seguiremos ampliando. Además, seguiremos apostando por dar voz a los artistas más jóvenes, poner en valor el trabajo de las mujeres artistas y dar cabida a las nuevas tendencias artísticas.

«PAC es mi casa»

«El objetivo es seguir ampliando la comunidad que rodea el proyecto»

– Como comisaria has realizado curadurías con PAC y exposiciones independientes en Madrid, Londres y Querétaro (México). ¿Cómo se enfocan estos proyectos?

En España he comisariado proyectos junto a PAC que se han presentado en diferentes ferias como ARCO, ESTAMPA, MARTE… Son proyectos con los que pretendemos acercar el arte al gran público, presentando a artistas potentes que trabajan en el territorio nacional. En cada uno de los comisariados intentamos dar cabida a artistas distintos para poder dar una visión amplia de los estilos que copan el sector artístico… Entre todos los proyectos que hemos realizado desde PAC hemos trabajado con más de 100 artistas… Por nombrar a algunos de los que más recientemente han participado encontramos a Mariajosé Gallardo, Cristina Toledo, Alejandro Botubol, Marina Vargas, Ruth Gómez, Ricardo Cavolo, Bran Solo, Carlos Hache, Ángel Toren, Little, Mercedes Bellido, El Dios de los Tres, Laura Pacheco…
Esta apuesta por apoyar a los artistas españoles jóvenes fue lo que nos impulsó a Regina Pérez Castillo y a mí a crear una sección en PAC que se llama Millennial Artists. Para celebrar el primer aniversario de la sección se nos ocurrió que no había mejor manera que organizar una exposición para dar difusión a los artistas de los que hablábamos y si lográbamos realizarla fuera de España, mucho mejor. Así surgió el proyecto Atavic Memory que se presentó en el espacio londinense SCAN Spanish Contemporary Art Network en 2019.
Además, he comisariado de manera independiente diferentes exposiciones, una de las más queridas para mí, por su significado, fue la exposición Nadie hablará de nosotras cuando estemos muertas de la artista Julia Martínez que tuvo lugar en Madrid en 2021. La muestra reflexionaba sobre los feminicidios de Ciudad Juárez, una reflexión sobre la violencia contra las mujeres y un homenaje a todas las mujeres desaparecidas y asesinadas. Tras su paso por Madrid, la exposición itineró a México, exponiéndose en una de las salas del Centro de Arte Bernardo Quintana de la Universidad Autónoma de Querétaro.

– Tu último comisariado para la exposición Tu silencio no te protegerá se basa en la Teoría Arquitectura Híbrida Simulada del artista Omar Jerez ¿cómo articulaste el proyecto y por qué ha sido tan especial?

La propuesta que me hizo Omar consistía en seguir el decálogo de su teoría Arquitectura Híbrida Simulada, a grandes rasgos se trataba de llevar a cabo una exposición experimental siguiendo una serie de reglas. Una de las primeras normas consistía en que el lugar expositivo tenía que estar fuera del circuito artístico que todos conocemos… nada de galerías, salas de exposiciones, sino que el arte tenía que llegar a espacios para los que generalmente el gran arte fuera inaccesible… el segundo requisito consistía en que los artistas debían fundir sus piezas con el espacio para así hacernos reflexionar sobre qué es el arte, y si solo es válido el que se expone en galerías de arte, museos o ferias…
Una vez que te proponen un proyecto así tienes que reflexionar mucho y marcar unas pautas de lo que tú quieres transmitir como comisaria. La teoría de Omar Jerez tenía ya un peso importante por sí sola, y era totalmente válido crear una exposición con piezas camufladas para transmitir el concepto… pero mi visión era otra… quise ir un paso más allá y utilicé la teoría como pretexto para lanzar un mensaje con el que romper, al menos durante unas horas, la narrativa de silencio que ha rodeado a las mujeres desde hace siglos.
Algunos proyectos tienen la capacidad de generar una unión especial entre todos los participantes (artistas, publico, comisario) y en este caso pasó. Las artistas participantes Cristina Huarte, Marta Nieto, Julia Martínez y Diana Velásquez se comprometieron desde el principio con el proyecto, ha sido una suerte contar con ellas y conocer sus diferentes visiones para romper con el silencio que rodea a las mujeres.
Cuando realizas un proyecto experimental, de prueba-error nunca sabes cómo va a reaccionar el público asistente. En este caso la experiencia no pudo ser más positiva… no es fácil ni cómodo llegar a una exposición en una casa particular, donde te explican dos o tres conceptos sobre la teoría y el concepto curatorial y te piden que analices el espacio y que plantees teorías sobre lo que ves. Todos los que vinieron estuvieron totalmente receptivos, entraron en el juego, propusieron unas teorías interesantísimas sobre lo que encontraban en el espacio expositivo, algunas con una carga conceptual que me habría encantado que hubieran formado parte de la exposición. Se creó una burbuja de confianza en la que los asistentes contaban sus propias vivencias y no se quedaron callados al sentirse identificados con algunas de las piezas…
Estoy muy agradecida por todo lo que la exposición generó… ojalá siempre se pudiera crear esta sinergia en todos los proyectos que llevamos a cabo.

«Cuando realizas un proyecto experimental, de prueba-error nunca sabes cómo va a reaccionar el público asistente»

«Se creó una burbuja de confianza en la que los asistentes contaban sus propias vivencias y no se quedaron callados al sentirse identificados con algunas de las piezas»

-Eres cofundadora del proyecto Woman Art House de difusión del trabajo de mujeres artistas contemporáneas ¿cómo surgió y en qué momento se encuentra? 

El proyecto surgió en un momento en el que era muy necesario poner en valor el trabajo de las mujeres artistas. En una primera fase nos centramos en hacer de altavoz de estas mujeres creadoras a través de las redes sociales, comenzamos a hacer hilos en Twitter sobre artistas que se completaban con artículos más extensos y llegamos a reunir un archivo muy completo de mujeres artistas de todo el mundo.
La iniciativa evolucionó y en esta segunda etapa el enfoque cambió ligeramente. Abordamos el trabajo de las artistas de manera transversal, tomando como punto de referencia temáticas comunes que afectan de primera mano a las mujeres. Así surgió la primera publicación de WAH, titulada Violencias, y la idea es seguir por este camino editorial y que sea la primera de una larga serie.

– También en Contemporary Art by Women realizas visionados del trabajo de artistas mujeres jóvenes ¿cómo es la experiencia y qué te ha sorprendido?
Comencé este proyecto ante la necesidad de acceder y conocer a un mayor número de mujeres artistas. Desde el perfil de Instagram de Contemporary Art by Women lanzo convocatorias en las que invito a las creadoras a mandarme su portfolio, explicarme su serie artística más significativa… Entre todas las participantes hago una selección y difundo su trabajo en PAC.
Siempre que lo he hecho ha sido una experiencia muy enriquecedora, he conocido a artistas y proyectos increíbles de todo el mundo. Siempre es bueno ampliar tu campo de acción y conocer lo que se hace en otra parte y gracias a esta herramienta he podido hacerlo. No pasará mucho tiempo antes de que lance una nueva convocatoria.

«Siempre es bueno ampliar tu campo de acción y conocer lo que se hace en otra parte»

«gracias a esta herramienta he podido hacerlo. No pasará mucho tiempo antes de que lance una nueva convocatoria»

– ¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo y con qué disfrutas menos?

Me apasiona mi trabajo. Puede que lo que más me guste sea la parte creativa, en la que te sientas delante del ordenador y dejas fluir las ideas para escribir el siguiente texto o para idear el concepto de la próxima exposición, disfruto mucho el proceso. La parte que me resulta más tediosa es la relativa a los trabajos administrativos, una ocupación mucho más monótona pero necesaria para llevar a cabo todos los proyectos.

– ¿Qué aconsejarías a una persona que empieza a estudiar Historia del Arte y quiere trabajar profesionalmente en el mundo del arte?

Cuando yo empecé a estudiar Historia del Arte me dijeron que una de las cosas que tenía que hacer era visitar el Museo del Prado prácticamente todos los días…Yo no llegué a ir todos los días, pero durante una época sí fui todas las semanas. Si te decantas por los estilos artísticos allí representados es imprescindible conocerlos bien.
Esto que me recomendaron sobre visitar el Prado yo lo extendería, es imprescindible que conozcas el máximo de espacios dedicados al arte, no tengas miedo a ir a las galerías, puede que no entiendas algunos proyectos artísticos y te parezcan una locura, pero llegará un momento en que le encuentres el sentido. Ve a exposiciones, conoce a artistas, interactúa con profesionales del sector.

– ¿A qué te gusta dedicar tu tiempo cuando no trabajas?

Dedicándome al arte es un poco complicado desconectar… siempre hay alguna exposición que ver y aprovecho mi tiempo libre para viajar y visitarla. También paso mucho tiempo leyendo novelas y viendo películas o series.

– Un deseo que te gustaría se hiciera realidad

Que se respete el trabajo de los artistas y los agentes culturales y mejoren las condiciones de precariedad en la que subsiste gran parte del sector.

«Que se respete el trabajo de los artistas y los agentes culturales

y mejoren las condiciones de precariedad en la que subsiste gran parte del sector»

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